Kiss the Ground: la llave de la regulación del clima está bajo nuestros pies
Si has perdido la esperanza, Kiss the Ground es para tí. Es un documental clave, que aborda aspectos de la crisis climática que no se tienen en cuenta, como es el carbono que ha desaparecido del suelo. Con una mirada ecosistémica, Kiss the Ground desgrana las causas del deterioro medioambiental, y también señala el camino, las soluciones que ya están en marcha en numerosos puntos del planeta.
"El carbono no es el malo de la película,es el motor de la vida"
En realidad es muy fácil causar un cambio climático local; ha sucedido muchas veces a lo largo de la historia de la humanidad, y tenemos ejemplos muy cercanos.
No hay una sola civilización que haya sobrevivido a la destrucción de su suelo; el problema actual es la magnitud y escala de esa destrucción. La buena noticia es que sabemos por qué ha sucedido y cual es el camino para revertir la situación.
La evidencia muestra que limitar el problema del clima a un solo factor, el aumento del CO2 atmosférico, nos coloca en un callejón sin salida. Necesitamos ver también la otra cara de la moneda, que es la disminución del carbono del suelo y lo que ello conlleva: disminución de la fertilidad, la caída de la biodiversidad, ruptura del ciclo el agua, erosión, creación de enormes islas de calor, desregulación del clima.
Restablecer el carbono del suelo, restablecer la esperanza
Kiss the Ground muestra que la solución a la crisis climática está a nuestro alcance: es una utopía que camina. Se trata de restablecer la biología del suelo, piedra angular sobre la que se asienta la vida y la regulación del clima.
Pero la solución requiere algo más que datos: requiere otra manera de pensar, otra mirada sobre la naturaleza, ir más allá de mitos arraigados como que los animales agravan el cambio climático por el metano que producen o el alimento que consumen: no es verdad.
Trailer
En realidad, la manera más eficaz de regenerar un territorio es mediante la participación de de animales pastoreados regenerativamente, pues es el aporte más directo y rico de microbiología capaz de incorporar carbono al suelo.